Por la mañana me levanto pronto, cojo el coche y me voy a la presa del embalse de Linares. Allí es donde comienzan las Hoces del Río Riaza. Ya que no tenemos mucho tiempo en este viaje, decido aprovechar ese rato para visitarlo mientras corro. Así que bajo hasta el río desde el parking para vehículos y luego recorro la orilla del cauce del Riaza hasta llegar al viaducto.
Después de desayunar salimos a dar una última vuelta por Maderuelo. Lo malo es que está lloviendo y el día no está agradable para andar por la calle. Además, queremos hacer el recorrido turístico por el pueblo, pero no se había apuntado suficiente gente, por lo que se cancela. Así pues, nos acercamos a la iglesia de Santa María del Castillo, aprovechamos que está terminando la misa dominical y, justo cuando acaba, entramos para visitarla. No es muy grande, y los parroquianos están muy amables indicándonos donde se encuentra el atractivo más "particular", una momia.